Uno de los efectivos perdió piezas dentales producto de los golpes; otro tuvo cuatro puntos en una pierna. Jefe de operativo hace evaluación positiva del mismo. Nueve policías resultaron heridos y 20 hinchas, tanto de Peñarol como de Nacional, fueron detenidos, tras el clásico que se jugó este domingo, informó a Subrayado el jefe del operativo de seguridad, Mayor Ojeda. Entre los efectivos heridos hay uno que perdió piezas dentales tras sufrir golpes en su cara con las vallas y otro que tuvo que ser intervenido y le hicieron cuatro puntos de sutura en una pierna. Más allá de esto, ninguno de los efectivos reviste gravedad. En tanto, los hinchas fueron detenidos por causar desórdenes y atentados contra las fuerzas policiales. Son tres menores de edad y el resto mayores. 15 de ellos fueron detenidos por desórdenes, dos por agresión a la Policía y tres por hurto. Permanecen a disposición de la Justicia. Si bien el jefe del operativo de seguridad hizo una evaluación “positiva” porque pese a los policías heridos “no hubo ningún muerto, no hubo que lanzar gas y no hubo que hacer disparos con arma de fuego”, el Ministerio del Interior emitió un comunicado hoy diciendo que se trató de "lamentables incidentes". Tal como se ve en las fotografías, en el Estadio Centenario hubo destrozos varios: asientos, canillas y baños rotos. El jefe del operativo destacó que son “daños menores” pues éstos podrían haber llegado a la Tribuna Olímpica y no lo hicieron porque se colocó un vallado metálico. INCAUTACIONES. En las puertas de acceso a la Tribuna Amsterdam se incautaron elementos de alta peligrosidad entre ellos 100 "bombardas" (2 bolsas de 50 c/u), materiales de una carga por unidad, y 12 "bombardas" ( 2 cajas de 6 unidades c/u), de tres tiros. No se incautaron armas, cortes ni bebidas alcohólicas. Se efectuaron más de un centenar de espirometrías que arrojaron un total de 20 muestras positivas, impidiendo el ingreso de dichas personas al Estadio Centenario sin detenciones derivadas de las mismas. PARTIDO DETENIDO.Más temprano, mientras se jugaba el segundo tiempo del clásico, el partido tuvo que ser suspendido a raíz de incidentes protagonizados por parciales aurinegros en la Tribuna Ámsterdam. Los hinchas sacaron las vallas y las lanzaron desde el tercer anillo hacia el exterior del estadio. El partido estuvo detenido por once minutos.
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